«El deseo es siempre deseo.
La falta genera al deseo.
El deseo nunca se satisface del todo.
El sujeto está sujetado al deseo»
(
Jacques Lacan)

 

 

¿Quién es ese hombre?

Hace apenas un mes, nos quedamos boquiabiertas al leer el informe-propuesta de modificación de la RPT de personal funcionario de la Consejería de Sanidad. La Secretaría General proponía la creación de una plaza de Jefatura de Sección Administrativa, nivel 22, adscrita al Servicio de Gestión Económica, Presupuestaria y Contratación, abierta a los subgrupos A2 y C1, con el fin de completar y reforzar la estructura de ese Servicio. Hasta aquí todo normal.

El asombro se manifiesta al leer las tareas que se le asignan, dos páginas, que comprenden la totalidad de las funciones del Servicio. Alegan que estas tareas requieren una formación específica en el ámbito económico. Lamentamos disentir en este punto. Más bien están requiriendo un graduado ‘summa cum laude’ por la Universidad de Harvard. ¡Qué suerte la de la Consejería de Sanidad! Si cuenta con una eminencia para un nivel 22, ¿qué sublimes serán entonces quienes ocupan los tres puestos de nivel 26 y el puesto de nivel 28 que también conforman el citado Servicio? Nivelón, nivelón. No entendemos como la NASA no se ha puesto aun en contacto con estas personas.

El asombro se convierte en pasmo al continuar leyendo que este puesto requiere plena disponibilidad para garantizar su desempeño, lo que conlleva un complemento específico similar a un puesto de nivel 25. Y el estupor se transforma en parálisis atónita al conocer que el caramelito de plaza debe ser provisto por concurso singularizado, blindaje ‘forever and ever’. Es en este punto cuando nos recorre por el cuerpo la “fiera inquieta” de Ángela María Forero, banda sonora de esta Pasión de Sanidades. Y por eso yo pregunto: ¿Quién es ese hombre? Que va a ocupar tan golosa plaza.

Y es aquí donde intervienen los protagonistas de la telenovela, los hermanos Reyes: nuestro apreciado Consejero de Sanidad, Jesús Reyes; a través de su, ni por asomo apreciada, Secretaria General, Inmaculada Reyes; con el consentimiento de nuestro gran Director General, Pepe Reyes, al más puro estilo del culebrón latinoamericano.

– Jesús Reyes: “Pinche güey, no quiero que me boten a mi parche (secretario), que ha agarrado una placita nivel 22 en Bienestar Social con el concurso”.

– Inmaculada Reyes: “No se preocupe cuate, estuve platicando con Bienestar Social y conceden que se quede aquí, de secretario de usted, con la plaza allí”.

– Pepe Reyes: “Sin problema panas. Igualito que tienes tú a tu secretaria, Inmaculada, una interina nivel 14 manejando funciones de un 16, sin la plata, y sin permitir que nadie más agarre esa plaza”.

– Jesús Reyes: “Pinche güey, crea una bien rebuena plaza aquí en Sanidad, para que mi parche (secretario) siga siendo mi parche (secretario), sin tener que retener la plaza de Bienestar”.

– Inmaculada Reyes: “Ahorita mismo cuate. Un nivel 22, con específico bien chévere y por concurso singularizado, para que nadie más nunca se la pueda chingar”.

– Pepe Reyes: “Sin problema panas. Verán qué chanza cuando les pateemos el orto a los boludos sindicatos”.

 

Pero los sindicatos hemos estado muy pendientes, como prometimos en la mesa sectorial, y hemos presenciado el bochornoso y vergonzoso culebrón orquestado por las altas esferas de Sanidad, con la connivencia de la Dirección General de Función Pública y el prestamismo solidario del convidado de piedra, Bienestar Social.

La nueva plaza nivel 22 creada a medida por la Secretaría General de Sanidad se le ha otorgado ya en comisión a su destinatario planificado, ese hombre que ha ejercido, ejerce y ejercerá sin solución de continuidad las funciones de secretario del Consejero de Sanidad, a pesar de haber tenido hasta ahora su plaza en Bienestar Social. Y para resarcir el “sacrificio” realizado previamente por Bienestar Social, interpretando el papel de prestamista, la jugosa plaza de secretario/a del Consejero de Sanidad, nivel 18, se le ha concedido en comisión a una persona que sigue desempeñando sus funciones en la consejería de Bienestar Social.

 

¡Uhhhh! Vaya lío… (esta es de Objetivo Birmania)

La secretaria oficial del Consejero de Sanidad trabaja en Bienestar Social y el secretario oficioso del Consejero de Sanidad no trabaja en el puesto nivel 22 del Servicio de Gestión Económica, Presupuestaria y Contratación que le han otorgado en comisión, sino que nunca ha abandonado la silla de secretario del señor Jesús Fernández Sanz. Además, la secretaria oficiosa de la Secretaria General de Sanidad es una interina que no realiza las funciones de su plaza ubicada en una Dirección General de la Consejería de Sanidad.

…Los amigos de mis amigos, son mis amigos.

 

¡VIVAN LOS DESEOS CUMPLIDOS!
¡Y LA FUNCIÓN PÚBLICA!

 

 

S T A S
Sin subvenciones
Gobierne quien gobierne

 

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