NEGOCIACIÓN DECRETO TELETRABAJO (I) | Los Sindicatos unidos y a por todas, la Administración recortando, dificultando el acceso, y endureciendo el teletrabajo.

 

Se ha iniciado la negociación del Decreto del teletrabajo con la Dirección General de Función Pública, que ha mostrado, desde el primer momento, mínima voluntad de modificar su propuesta inicial y de llegar a acuerdos.

Su propuesta está ubicada totalmente de espaldas a la pandemia que sufrimos, que ni se nombra ni se toman medidas, aunque se incluya una Disposición Adicional que permite la modalidad en situaciones excepcionales, pero sin negociación y de forma totalmente discrecional por parte de la Administración.

También es un compendio de sinsentidos:

  1. En el incremento de controles burocráticos y discriminatorios.

  2. En las exclusiones de puestos como jefaturas de servicio o de funciones como dirección, coordinación, supervisión, etc. que habría que estudiar en cada caso y teniendo siempre presente la parte de prestación presencial.

  3. En las limitaciones respecto al porcentaje del tiempo de teletrabajo respecto al presencial, o de presencia física de efectivos en los centros de trabajo, que habría que delimitar caso a caso y como en otras CC.AA., o en la Administración General del Estado, poder llegar hasta un 80% de teletrabajo (un día a la semana presencial).

  4. En la creación de una Comisión de seguimiento política y no técnica y sin presencia sindical.

  5. En no establecer financiación alguna, cuando deberían contemplarse los gastos de equipos y de energía, de conexiones, etc. que están por negociarse.

En la reunión que se ha celebrado hoy se han revisado los 5 primeros artículos del proyecto que contienen materia muy relevante.

Respecto a los requisitos para acceder, siguen manteniendo el requisito de seis meses de prestación previa y la penalización de un año si se ha tenido una evaluación desfavorable. Parece que “admiten” que pongamos los equipos, personalmente, hasta que la Junta haga la adquisición de los suyos.

Sobre los puestos no susceptibles de teletrabajo, únicamente “se pensarán” si revisan algo sobre algunas de las tareas de inspección. Todos los sindicatos hemos insistido en la necesidad de no excluir ni puestos ni funciones a priori y en todos los casos establecer la posibilidad y el porcentaje puesto a puesto y evitar también definiciones ambiguas y abiertas que les den la oportunidad de rechazar cualquier puesto arbitrariamente.

En cuanto al plan de trabajo individualizado, se crea un sistema burocratizado, absurdo y discriminatorio que parte de la idea de que las personas teletrabajadoras son sospechosas y proclives al “escaqueo” (será eso de que “piensa el ladrón…”). Exigimos que se apliquen los mismos criterios y controles que al personal presencial.

Mañana, 17 de febrero, abordaremos el segundo acto de la negociación… o del paripé, ya se verá. Los Sindicatos continuaremos peleando, incidiendo en los temas más transcendentales: los puestos y funciones que podrían prestarse en teletrabajo, quitar controles burocráticos excesivos y las limitaciones previas en porcentaje de jornada en teletrabajo o de efectivos en trabajo presencial.

En estos temas nos jugamos el teletrabajo, y las Organizaciones Sindicales sabemos que, únicamente posiciones firmes y unitarias podrán doblegar en algo la monolítica posición de la Dirección General de la Función Pública y  así negociar desde los parámetros marcados por la OMS o por el Ministerio de Sanidad del Gobierno de la Nación, quienes siguen recomendando la máxima extensión del teletrabajo como herramienta eficaz para evitar el contagio del covid19, y garantizando que esto no sea en detrimento del servicio público y de los derechos de la ciudadanía.

STAS-CLM
Toledo, 16 de febrero de 2021.

 

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