VALORACIÓN SENTENCIA | Reconocimiento antigüedad Personal Fijo Discontinuo
En septiembre de 2016 se inició un proceso judicial para intentar reconocer la antigüedad de los meses de julio y agosto del personal que ocupa puestos de trabajo de carácter Fijo Discontinuo, tanto a efectos económicos como de méritos en procesos selectivos.
El 30 de mayo de 2018 mediante sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha se reconoce el derecho del personal fijo discontinuo a que se le reconozcan los meses de julio y agosto a los efectos del cómputo de antigüedad. Esta sentencia fue recurrida por la Junta en casación ante el Tribunal Supremo, el cual ha dictado sentencia, con fecha del 30 de septiembre de 2020, desestimando el recurso presentado por la Administración Regional. En ambos procesos judiciales han sido parte los 4 sindicatos con representación en el ámbito del Personal Laboral de la JCCM, entre ellos STAS-CLM, como así se dispone en el fallo de ambas sentencias.
¿Cuáles son los efectos de esta sentencia?
¿Qué debe hacer ahora la Administración?
Lo lógico, y así lo hemos solicitado por escrito, es que la Administración aplique la sentencia de oficio, y de forma inmediata, por tratarse de un conflicto colectivo que afecta a la totalidad de trabajadores y trabajadoras laborales que ocupan puestos fijos discontinuos, evitando así una innecesaria acumulación de reclamaciones individuales de resultado claro y cierto.
Valoración
Al margen de los efectos directos que supone la sentencia, de reconocimiento de antigüedad, en STAS-CLM consideramos que con esta sentencia la Justicia empieza a reconocer una realidad que llevamos 20 años planteando a la Administración Regional, como es la injusticia que supone la existencia de este tipo de contratación. En algún momento habíamos confiado en resolver este problema mediante la negociación, sobre todo cuando han llegado dirigentes a la Consejería de Educación con un pasado sindicalista en el que se posicionaron en contra de este tipo de contrataciones dentro de la Administración Regional, pero los hechos nos demuestran que la negociación no sirve, no dejándonos más remedio que intentar resolver la situación por medio de procesos judiciales, este ha sido el primero y confiamos en que los siguientes procesos tengan el mismo fin, donde la Justicia reconozca la situación de discriminación obligando a la Administración regional a terminar con este tipo de contratación.