Estando como estamos, en una crisis ecosocial sin precedentes en la que se hace más necesario que nunca visibilizar a las mujeres que se encuentran en el entorno rural y reivindicar su derecho al trabajo en condiciones dignas y a una mayor participación social, aspectos en los que se encuentran aún con mayor desigualdad que las mujeres urbanas.

Su contribución al desarrollo sostenible, con la mejora de los procesos agrícolas para el cuidado de la tierra y de la vida es incuestionable, será con su aportación conseguir que encontremos caminos para un desarrollo sostenible de nuestro planeta, así como para mejorar las condiciones de los seres vivos que lo habitamos.

Por otro lado, es fundamental el trabajo que hacen las maestras rurales, posibilitando procesos de participación en espacios al margen de la familia, cuestionando modelos sociales patriarcales y educando a las niñas y niños en la lucha por la igualdad y por los derechos humanos.

La crisis ecosocial afecta de forma desigual según la parte de la tierra en la que hayas nacido y también afecta desigualmente a las mujeres, ya que son ellas quienes se encargan de conseguir agua en el 80% de las viviendas sin acceso al agua, quienes se encargan de la alimentación de las criaturas, quienes cultivan tierras que cada año son menos cultivables, etc.

Desde nuestra Organización de Mujeres de CI queremos visibilizar todos estos trabajos visibles e invisibles, agradecerles todo lo que hacen por cuidar aspectos fundamentales para la vida y reivindicar el derecho a condiciones laborales dignas. Una de las claves para lograr un futuro posible está en el medio rural, y por supuesto está y estará en sus mujeres.

 

Organización de Mujeres de la CI
15 de octubre