índice

El pasado jueves día 26 de septiembre de 2015, asistimos en las Cortes Regionales, entre atónitos y estupefactos, a la mayor tomadura de pelo realizada por los políticos de esta región a  los empleados y empleadas públicos de la JCCM.

Los protagonistas de tamaño engaño fueron los Grupos Parlamentarios presentes en la cámara regional (PP, PSOE y PODEMOS); que en un alarde de cinismo y demagogia, y actuando más en beneficio de sus intereses políticos y electorales, abandonaron y se mofaron de las justas reivindicaciones de las empleadas y empleados públicos de esta región.

Curiosamente, los tres grupos con representación parlamentaria, defendieron en mayor o menor medida la restitución de las condiciones laborales arrebatadas en la legislatura anterior; aunque el resultado final fue que ninguna de las propuestas presentadas haya sido aprobada. Curiosa contradicción.

La propuesta del PSOE propugnaba la recuperación de todos los recortes producidos a lo largo de la legislatura anterior, sin comprometerse a poner plazos concretos para cada medida, y poniendo como límite temporal la legislatura que comienza, cuestión que entra en contradicción, tanto con las enmiendas presentadas en el año 2014 donde exigían la devolución inmediata en ese año de los derechos arrebatados por Cospedal, como con las reiteradas promesas realizadas durante la campaña electoral donde el señor Page se comprometió a su devolución inmediata. La excusa alegada por el Consejero en su exposición ante la cámara, es que cuando hicieron las promesas no sabían en qué estado se encontraban las arcas de la región (¿). Este señor que se ponía al frente de las movilizaciones contra los recortes de Cospedal nos debe de tomar por tontos a todos los empleados y empleadas públicos de la JCCM. Sus promesas le sirvieron para acumular votos, y ahora de forma mentirosa y mezquina aplica el dicho de “si te he visto no me acuerdo”. No se preocupe señor Consejero que las empleadas y empleados públicos refrescarán su memoria en el momento oportuno.

Por su parte, la propuesta del PP se remitía exclusivamente a reclamar la devolución del 50% de la paga extra de 2012, con efectos de enero de 2016, sin mencionar ni reclamar el resto de derechos arrebatados por el gobierno de Cospedal.

Por último, el representante de PODEMOS en la cámara, con un esperanzador y buen hilvanado discurso, expuso con claridad la necesidad de recuperar todos los derechos arrebatados a lo largo del ejercicio 2016, en consonancia con las aspiraciones de las empleadas y empleados públicos de la región.

Pues bien,  lo esperpéntico, lo ignominioso, y lo indignante llegó a la hora de las votaciones de las tres propuestas presentadas, una por cada grupo parlamentario, y el posicionamiento de los distintos Grupos a la hora de votarlas. Todos defendieron sus propuestas, hasta ahí correcto.

Lo sorprendente, más de unos que de otros, fue la votación final de las propuestas de los contrarios. Así cuando se votó la propuesta del PSOE, el PP votó en contra y PODEMOS se abstuvo, resultando rechazada la misma, siendo la votación congruente con la exposición realizada por cada grupo parlamentario.

Cuando se votó la propuesta de PODEMOS, el PSOE votó en contra, y el PP se abstuvo, por lo que la propuesta también fue rechazada. En esta votación comienzan a aparecer las primeras incongruencias, en este caso con el grupo parlamentario del PP, y desde dos puntos de vista. En primer lugar existe una incongruencia con la exposición realizada en la cámara, plagada de recordatorios al PSOE sobre sus promesas electorales incumplidas en materia de Función Pública. Y en segundo lugar, incongruencia política, pues resulta extraño que teniendo la oportunidad con su voto de infringir una derrota política al PSOE votando afirmativamente a la propuesta de PODEMOS, optara por abstenerse, salvando de esta forma la posición de su contrincante político.

Pero lo más kafkiano llegó con la votación de la propuesta del PP, en la que obviamente el PSOE ha votado en contra, y en la que PODEMOS finalmente se alió con el PSOE votando en contra, resultando una vez más rechazada la misma, y que de haberse abstenido hubiera supuesto la aprobación de la propuesta por la que en el mes de enero de 2016 todos los empleados públicos de la JCCM habrían cobrado el 50% de la paga extra de 2012 que restaba por cobrar. La postura de PODEMOS en este Pleno fue lo más incongruente y decepcionante de la mañana, y da una imagen nítida del seguidismo y la dependencia de este partido respecto del gobierno presidido por García Page. Lo más lógico, en aras del mantenimiento de la equidistancia e independencia, hubiera sido abstenerse en la propuesta del PP al igual que lo hizo con la propuesta por el PSOE; más aún cuando la propuesta del PP recogía una parte del todo que solicitaba PODEMOS.

La cruda realidad es que en la función de teatro interpretada por todo el elenco de políticos de la región, la puesta en escena fue la esperada, pero el desenlace de la trama ( rechazo de todas las propuestas) fue decepcionante, donde el escenario más que para protagonizar como argumento central una defensa de la restitución de los derechos arrebatados a los empleados públicos en los últimos años ( 5% de la tasa Zapatero, 3% de la tasa Cospedal, paga extra, moscosos, canosos, IT, acción social…etc), sirvió para escenificar una especie de contubernio (acuerdo o asociación que resulta indigna) de los tres Grupos Parlamentarios presentes en la cámara regional, en contra de los legítimos derechos e intereses de los empleados públicos de la región.

El próximo miércoles vuelven a las Cortes la recuperación de los derechos laborales de las empleadas y empleados públicos. Esperemos que los grupos políticos hayan aprendido la lección, porque en caso de repetirse tan lamentable espectáculo tomaremos buena nota de sus engaños y actuaremos en consecuencia.