En el día de hoy nos hemos desayunado con un nuevo golpe de rosca a las libertades y derechos de los trabajadores y trabajadoras de la Junta, con la premisa de la “racionalización y la garantía de los servicios ¿esenciales?

La Orden de 11/07/12 de Administración Electrónica publicada hoy en el DOCM aunque por un lado pone en papel las normas que ya rigen sobre utilización de medios electrónicos, por otro pone bajo sospecha la correcta utilización que de la misma se hace actualmente por los empleados públicos y somete a un “cacheo” exhaustivo nuestras herramientas de trabajo: Correo electrónico, Internet, fax, teléfono…

Hay una intención oculta debajo de las buenas palabras e intenciones del preámbulo, y no es otro que continuar con la estigmatización y “persecución” del empleado público, como si fuésemos los causantes de la penuria económica en la que nos encontramos.

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