TOLEDO, 18 Abr. (EUROPA PRESS)

Un total de seis sindicatos -la Intersindical de Castilla-La Mancha CCOO, UGT, FSES, SIC-GS y USO- convocarán una nueva manifestación en todas las capitales de provincia en contra de los “recortes” en los servicios públicos en la región. La fecha que se estudia, aún sin confirmar, es el próximo 22 de mayo, coincidiendo con el aniversario de las elecciones autonómicas y municipales.

Así lo han asegurado los representantes de los mencionados sindicatos, que han explicado que previamente harán un “trabajo de campo” en los centros de trabajo para recabar fuerzas entre los empelados y conseguir así que sea “la manifestación más grande de la historia de Castilla-La Mancha”. Los sindicatos han mostrado su voluntad de mantener la unidad sindical frente a los “recortes” de los gobiernos de Mariano Rajoy y María Dolores de Cospedal por considerarla “la mejor arma para defender los servicios públicos”.

El representante de Intersindical Castilla-La Mancha -formada por los sindicatos STE, STAS y SF-, Gustavo Fabra, ha asegurado que las movilizaciones irán “de menos a más” y servirán para “parar los ataques que vienen”.


La manifestación más grande que se recuerde

A partir de ahora, según ha dicho, se va a recoger “el malestar de los trabajadores” para “ir acumulando fuerzas” y, cuando llegue el momento, convocar “la manifestación más grande que se recuerde en Castilla-La Mancha”. “Vamos a plantar cara y habrá una primavera muy caliente, a no ser que el Gobierno regional negocie las medidas que nos intenta imponer”, ha subrayado, asegurando que desde la unión sindical se opondrá resistencia a los presupuestos regionales y a las cuatro privatizaciones de hospitales públicos anunciadas por el Gobierno regional.

Por parte de CCOO, Carmen López ha mostrado su desacuerdo con los “recortes” y ha avisado al Gobierno de María Dolores de Cospedal que estarán “vigilantes con los presupuestos”, argumentando que en Castilla-La Mancha “ya no se puede recortar más porque los ajustes ya están hechos”. “La región parecía el laboratorio del PP, y así se está demostrando”, ha asegurado. El representante del Sindicato Independiente de Celadores y Personal de Gestión y Servicios (SIC-GS), Julián Manzanares, ha manifestado que “no se ve el fin con los recortes”, por lo que las protestas en la calle “ya no son una guerra laboral sino una guerra social en la que todos están implicados, no solo como trabajadores sino también como usuarios”.

Más de 5.000 empleos menos

Por su parte, el secretario de Organización de Federación de Servicios Públicos de UGT, Miguel Guerra, ha indicado que con las medidas llevadas a cabo por el Gobierno de Cospedal “se han destruido entre cinco y seis mil empleos, sumando las contrataciones que no se han hecho”, lo que supone “un ocho por ciento del total de 75.000 empleados públicos que tenía la región”. De otro lado Francisco González, de Unión Sindical Obrera (USO), ha criticado que en España existen los ratios de funcionarios “más bajos de Europa y cualquier funcionario paga más IRPF que cualquier sociedad anónima”, además de abogar por que la banca “haga esfuerzos, ya que está recibiendo mucho dinero que habrá que reinvertirlos en infraestructuras públicas”. “Los que han provocado la crisis tendrán que pagar algo”, ha sentenciado.

En representación de la Federación de Sindicatos de Educación y Enseñanza (FSES), Pilar Sánchez ha hecho referencia a que “la reducción de salarios, de servicios y el recorte de 10.000 millones de euros en Sanidad y Educación anunciado por el Gobierno de Rajoy afectará a los pilares de la sociedad”. “Esos recortes incidirán en la calidad de unos servicios públicos que no deben seguir siendo los paganos de la crisis”, ha agregado.

Críticas a CSI.F
Por otro lado Gustavo Fabra, de Intersindical C-LM, ha criticado al sindicato CSI.F por “renunciar a unión a cambio de tener un trato de favor por parte del Gobierno regional”. “Están todos los días en los despachos de consejeros y directores generales tratando sus asuntitos”, ha aseverado. Para terminar, Fabra ha incidido en que “no hay ningún partido político dirigiendo” las iniciativas y acciones de estos sindicatos. “No está llamándonos ni Page, ni Bono, ni Barreda para dirigirnos, que nadie se equivoque”, ha finalizado.