Hay que felicitar al Tribunal Superior de Justicia de Castilla La Mancha por su decisión que ampara a los ciudadanos, que defiende a los ciudadanos contra los atropellos de necios gobernantes que siguen una política autista de desmantelamiento de lo público, destruyendo el estado del bienestar.

Pero, sobre todo, hay que felicitar a los alcaldes y concejales que se han puesto al frente de sus pueblos para protestar, para reclamar y para denunciar el mantenimiento de Servicios de primera necesidad. Tenemos que destacar a estos honrados y valientes políticos que son verdaderamente la representación de sus conciudadanos. Lejos de estos otros políticos del gobierno regional liquidadores del bienestar y derechos de sus gobernados.

Y hay que felicitarse porque la razón se va recuperando. Y tras la razón, la esperanza. Una esperanza que estaba perdida en un clima de desánimo y desesperación.

Parecíamos abocados al fracaso, a la frustración y a la impotencia en la lucha contra un gobierno regional que se mostraba todopoderoso y que aplicaba una política de recortes salvajes en empleo público, en servicios sanitarios, en igualdad educativa, en derechos laborales, en suma, en libertades.

A lo largo de más de un año de lucha, dura y desigual lucha, los empleados públicos liderados por los sindicatos de clase, han salido a la calle contra este gobierno ausente, han secundado huelgas contra esta política canalla y, ayer, el TSJ les ha dado la razón. Ha triunfado la justicia, pero no solo la del TSJ de Castilla La Mancha, sino la justicia con mayúsculas, esa justicia cargada de razón, de lógica y, por lo tanto de humanidad, que nos decía que esto no puede ser, que no se nos puede castigar siempre a los mismos, que no somos responsables los ciudadanos de a pie de la crisis, que no somos nosotros los ladrones ni los que cobran tres sueldos, que los responsables son otros, y esos otros son banqueros corruptos y políticos ineptos.

Los jueces han apuntado con el dedo a los responsables directos de este desastre, de esta ignominia, de este azote que están causando en nuestra región la Sra. Cospedal García y el Sr. Echaniz Salgado entre otros. Señores gobernantes, vuelvan ya a la realidad, váyanse a su casa.

Sr. Leandro Esteban ¿hasta cuándo va a ser el “tonto útil”? Señores del PP de Castilla la Mancha, ¿hasta cuándo van a seguir permitiendo que politiquillos de otra región, que parecen de otra galaxia, hagan política de tierra quemada, cuando la tierra quemada es su propia tierra?

¡Qué gran San Antón disfrutaron ayer los señores y señoras del gobierno regional! ¡Qué regalo más amargo han recibido del poder judicial!

La decisión de suspensión cautelar del cierre de las urgencias hospitalarias es solo el inicio, el punto de no retorno para una política equivocada y antipopular, es el principio del fin de un gobierno desgastado y moribundo.

Ciudadanos de Castilla La Mancha, los alcaldes de nuestros pueblos nos han mostrado el camino, solo hay una estrategia: manifestarse, protestar, denunciar, pelear.

No estamos anestesiados aunque lo parezca, ni vencidos, ni doblegados, todavía tenemos el poder porque ¿qué es la democracia? ¿No es acaso el poder que reside en el pueblo? Pues eso, a por ellos que son pocos y cobardes.

Parafraseando al gran poeta: “a galopar a galopar hasta enterrarlos en el mar “

Ánimo y determinación.